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Homenaje a las empresas familiares de la seguridad. Relevo generacional.
Orgullo de formar parte de la tradición y el relevo en las empresas españolas de seguridad.
25 de Junio de 2015
25 de Junio de 2015
Orgullo de formar parte de la tradición y el relevo en las empresas españolas de seguridad.
Bajo el título “Padres e hijos, relevo generacional”, Seguritecnia organizó el pasado 2 de junio, un significativo y especial almuerzo con motivo de su 35 aniversario. El encuentro reunió a más de una treintena de empresas nacionales de seguridad en las que está conviviendo actualmente presente y futuro de la entidad.
“Hoy merece pasar a la primera línea una generación más joven, con nuevas energías, decidida a emprender con determinación las transformaciones y reformas que la coyuntura actual está demandando”, pronunció Juan Carlos I en su discurso de abdicación. Y es que, como en todas las profesiones, en las empresas de seguridad también es importante contar con profesionales preparados para asumir el relevo de los que se vayan jubilando. Por ello, coincidiendo con la celebración de los 35 años de la creación de la revista Seguritecnia, la publicación quiso celebrar el entrañable almuerzo “Padres e hijos, relevo generacional”, con el objetivo de que esta reunión fuera un punto de encuentro y acercamiento entre aquellos profesionales que están tomando el testigo de los padres, actuales responsables de las compañías.
En este sentido, Seguritecnia reunió a más de 60 profesionales, entre padres e hijos respectivamente, en el restaurante Jai Alai de Madrid el pasado 2 de junio. Entre los invitados que acudieron a este encuentro especial se encontraron algunas de las Empresas más importantes y representativas de actividades de seguridad privada como instaladoras, centrales receptoras de alarmas, venta y distribución de material electrónico de seguridad, vigilancia, etc. Entre ellas acudimos nosotros como Empresa Extremeña de seguridad representada por la Dirección de la Empresa, cargo que ostenta actualmente Olalla María Borrego Lara, relevo generacional de D. Juan Borrego Domínguez.
Olalla María Borrego es Arquitecta Técnica e Ingeniera de Edificación por la Universidad de Extremadura, formación que ha complementado con titulaciones en Dirección de Seguridad y Jefe de Seguridad, y como prueba de su buen hacer durante la etapa de su incorporación y relevo, está en posesión de mención honorifica tipo A otorgada por el Ministerio de Interior.
“Lo que hoy se significa con esta comida, el relevo generacional, tiene que ser y representar para vosotros (haciendo referencia a los hijos) un enorme orgullo por poder seguir los pasos de vuestros padres, que hoy en día son grandes empresarios”, señaló Javier Borredá, presidente de Seguritecnia. Asimismo, durante el encuentro también quiso lanzar un llamamiento a los jóvenes profesionales para que continuasen con ahínco e ilusión el trabajo emprendido por sus padres, ya que éstos han tenido que luchar mucho para conseguir que sus compañías tuvieran una implantación y un puesto destacado en el sector de la Seguridad. “Los jóvenes son el futuro de este sector y tienen que darle continuidad a este maravilloso mercado”, indicó Borredá.
A continuación tomo la palabra Ana Borredá, directora de Seguritecnia, que destacó: “el orgullo de pertenecer a una empresa española y familiar", así como se comprometió a mantener el contacto y la colaboración entre los relevos generacionales de las empresas que estaban allí presentes.
Asimismo, la publicación quiso agradecer a todos “la presencia a este almuerzo entre amigos”, como manifestó Ana Borredá, entregando una distinción a los allí presentes para conmemorar ese día y que quedará en el recuerdo de todos.
La comida también dejo alguna sorpresa, como el reconocimiento que también se quiso hacer al relevo generacional que está habiendo en Seguritecnia (editorial Borrmart) para dar continuidad al proyecto que emprendió su fundador, Ramón Borredá, padre y abuelo respectivamente de la actual generación. En esta ocasión, el encargado de entregar este galardón fue Antonio Ávila, histórico del sector de la Seguridad y amigo de la familia Borredá, quién dejó entre los allí presentes una magnifica reflexión: "en la vida se dan muchos pasos, pero lo más importante no es darlos, sino la huella que dejan. En este sentido, la familia Borredá ha dejado una profunda huella de la que todo el sector de la Seguridad estará siempre agradecido", abogó Ávila.